Bajo el título “Situación de proyectos y financiamiento en la industria minera”, el secretario de la Cámara Minera de San Juan y reconocido geólogo minero, Ricardo Martínez, realizó el abordaje de diferentes tópicos que hacen al presente y futuro cercano de la minería local.
Por Panorama Minero
En primera instancia puso de manifiesto la importancia de la electromovilidad como vector para reemplazar el consumo de energías fósiles. Pero, a pesar de ello, aclaró que el carbón es el mayor mineral en explotación mundial a este momento. El carbón referido es aquel que se quema para generar calor, y ello a pesar de la creciente importancia y participación de otros minerales como litio, cobre, cobalto. “Alemania registra un mayor consumo de carbón con motivo de las restricciones de gas producto de la guerra entre Ucrania y Rusia, el cual no se limita únicamente a un conflicto bélico en Europa, sino que tiene una implicancia global, con la posibilidad de cambiar la matriz de lo que el mundo pensaba en materia energética”.
En el campo de las inversiones en exploraciones mineras, se indicó que Argentina supo estar entre los primeros 10 destinos de exploración mundial, a la vez de haber perdido la oportunidad del peak de 2011-12 con motivo de la incorporación de las retenciones. En el año que finaliza, Argentina ha erogado unos US$158 millones, en el marco de una región –América Latina- que se ha consolidado como el mayor destino de inversiones, con un 25% del presupuesto exploratorio mundial.
Por cuanto a las tendencias en exploración según la instancia de cada proyecto, destacó que los brownfields –exploración en sectores cercanos a centros productivos- representan un 38%, cerca de un máximo histórico 2020, aunque se percibe un mínimo histórico en grassroots, con un 26%. “Antes se invertía bastante y se descubría mucho, ahora se invierte bastante más, y es más difícil y costoso descubrir; ello aplicable al cobre y oro”, afirmó Ricardo Martínez. Particularmente en el caso del metal rojo, solo una docena de descubrimientos importantes cupríferos han acontecido entre 2012 y 2021, comparado con 82 entre 2002 y 2011.
Otra tendencia observada en esta edición del ciclo Historia Compartida es la menor cantidad de financiamientos, lo que representa un problema para las compañías junior. En materia corporativa, las fusiones y adquisiciones –M&A / Mergers and Acquisitions- están latentes, aunque en otros mercados. Por caso, Martínez remarcó que en Sudamérica “observábamos 2 o 3 de estas operaciones por año, pero ahora está únicamente la fusión de Yamana con Agnico Eagle y Pan American.” Además resaltó que, para 2023 se espera un retroceso del 10% al 20% en los presupuestos exploratorios globales: los productores serán los principales actores, mientras que las junior medianas tendrán dificultades en levantar fondos para asegurar campañas. En función de la cuestión descarbonización y de la necesidad de elementos críticos para andar ese camino, la Secretaría de Minería de la Nación, informó que una gran parte de los 119 proyectos en cartera refieren al litio. Para avanzar en los distintos proyectos, la autoridad nacional precisó que se requieren de CAPEX de US$7.300 millones (litio), US$22.000 millones (cobre), US$1.650 millones (oro) y US$1.100 millones (plata).
Respecto a las provincias productoras, Santa Cruz lidera en exportaciones, seguida por San Juan, Jujuy, Salta y Catamarca. Ricardo Martínez destacó el crecimiento de la cantidad de empresas, especialmente proveedores de servicios, tecnología, consultores, traccionado principalmente por los proyectos de litio. Por cuanto al atractivo de inversiones para cada jurisdicción, precisó que el informe Fraser destacó el muy buen posicionamiento y mejora en el ranking por parte de San Juan y Salta.
Proyectos de cobre en Argentina
En el caso del cobre, elemento decisivo para alcanzar un planeta más sustentable, Argentina posee varios proyectos -en diferentes grados de avance- aunque no registra producción desde 2018 con motivo del agotamiento del mineral de Bajo la Alumbrera. Regionalmente, Chile y Perú -los dos principales productores mundiales- representan el 37% de la oferta global.
En el plano local, se analizó el cinturón de proyectos de cobre localizados en San Juan. En el clúster de pórfidos del Norte, cerca de provincia de La Rioja, una zona que hasta 2001-02 nunca había tenido inversiones, se identificaron 20 targets, entre los que actualmente son los proyectos Filo del Sol y Josemaría.
Posteriormente, y en cuanto al cinturón cuprífero del suroeste de San Juan, en el departamento de Calingasta se localizan emprendimientos como Pachón, Los Azules, Altar, entre otros. El orador destacó que, del otro lado de la cordillera, se concentra un 45% de la producción de cobre de Chile, desde la mina Los Pelambres hasta El Teniente.
Ricardo Martínez señaló los avances tecnológicos para el procesamiento de algunos tipos de óxidos presentes en algunos proyectos, como en Los Azules a través de la suscripción de un acuerdo entre McEwen Copper y Nuton, una empresa del grupo Rio Tinto. Recientemente, Regulus Resources -una empresa hermana de Aldebaran, localizada en Perú- también celebró un acuerdo con Nuton. “Es un nuevo tipo de tecnología que hay que observar con mucha potencialidad porque puede ayudar en la etapa temprana de los proyectos. No es nada extraño que, después de etapas de exploración, pueda haber más acuerdos respecto a este tipo de proyectos con alguna otra tecnología asociada.”
Ya en la región NOA también abordó el proyecto Taca Taca (Salta) así como MARA: de este último no se conocen los próximos pasos luego de la fusión de Yamana con Agnico Eagle y Pan American Silver. Independientemente de ello, se trata de un proyecto que puede utilizar la planta de Bajo la Alumbrera. Dese el punto de vista técnico y de infraestructura, MARA podría avanzar primero entre los distintos proyectos de cobre.
Impacto económico y social
Por último, pero no menos importante, se presentó el impacto tributario total y la rentabilidad de un proyecto minero, incluyendo retenciones a las exportaciones. Del total producido, el 55% corresponde a impuestos totales (45% nacionales, 6% provinciales, y 3% municipales), 35% costo operativo total y el 10% restante es rentabilidad, de donde se debe financiar el futuro de la mina a través de la exploración. Por lo tanto, se trata mucho más que el 3% de las regalías.
Además, acerca del mito del consumo de agua, refirió a que las concesiones de agua para minería son del 1%, mientras que para el agro es del 85%. También resaltó que los proyectos consumen menos agua total concedida, y en un análisis de toda la minería de San Juan –minas Veladero y Gualcamayo, Casposo inactivo, proyectos en exploración y proyecto Josemaría- consumiría un total de 772 l/s, lo que equivale a 250 hectáreas de riego tradicional a manto de una finca de uva u olivos.
En el plano netamente exploratorio, y sobre la base del análisis llevado a cabo por GEMERA (Grupo de Empresas Mineras Exploradoras de la República Argentina), las expectativas de inversión para 2022-23 se sitúan en el orden de los US$372 millones, un nivel casi similar de los US$383 millones de 2021-22.
Finalmente, y en una proyección 2023 a 2063 de los impactos de cuatro proyectos cupríferos localizados en San Juan, la provincia podría estar exportando al 2030 más de U$3.000 millones anuales, generando un empleo proyectado directo 20.000 trabajadores directos y 80.000 puestos de trabajo indirectos, así como la potencial generación de una dinámica productiva de sustentabilidad para seguir desarrollando el sector agrícola, ganadero, turístico, TIC, energético renovable, industrial, entre otros beneficios.
El orador finalizó indicando que deberían formularse algunos esquemas de compensación para mejorar la rentabilidad de los proyectos, al menos en la etapa de repago, de momento que en los primeros años es significativo lo que puedan acordar públicos y privados para mejorar la potencialidad de retorno rápido, haciendo que los emprendimientos sean más atractivos.