El Gobierno de esa provincia firmó un acuerdo para el posible financiamiento de obras de infraestructura que resultan claves para el desarrollo del yacimiento de potasio ubicado en Malargüe.
Por Panorama Minero
Mendoza está buscando la forma para reanimar el postergado proyecto de Potasio Río Colorado (PRC), un yacimiento con un potencial enorme que, sin embargo, ha estado paralizado desde 2013 -entre otras cosas- debido a un desafío logístico formidable: cómo transportar el mineral hasta un puerto de salida u otro destino desde la mina localizada a una distancia de unos 470 kilómetros de la ciudad de Malargüe. En un giro estratégico, la provincia puso sus ojos en Brasil, un gigante agrícola ávido de fertilizantes y un socio comercial clave, para encontrar una solución conjunta.
El proyecto que estuvo en manos de la brasileña Vale hasta 2020, se detuvo debido por cuestiones políticas y de problemas para avanzar con la vía férrea. Todo eso se vio coronado con una caída en el precio del potasio, ecuación que hizo que en 2013 Vale decidiera frenar el avance del proyecto, congelándose hasta que lo traspasó al Estado de Mendoza en 2020.
Hoy, la mina está en manos de Compañía Minera Aguilar S.A. (del grupo Integra Capital), en sociedad con la empresa brasileña ARG, después de un acuerdo que se concretó a fines de 2023. Por ahora se avanzó con una planta piloto con la promesa de una inversión de US$1.000 millones para producir 1,5 MT de potasio por año. La idea original de la explotación del yacimiento era producir unos 7 MT por año y llevar al mineral a través de un tren, especialmente construido, desde la mina ubicada en el departamento de Malargüe hasta el puerto de Bahía Blanca.
Brasil como origen del financiamiento y destino del mineral
Desde el inicio la cuestión logística, y especialmente la referida al transporte, es una de la cuestiones a resolver, por eso el gobernador mendocino, Alfredo Cornejo, encabezó una reunión de alto nivel con Cleber Oliveira Soares, Secretario ejecutivo adjunto del Ministerio de Agricultura y Ganadería de Brasil. El encuentro se enmarcó en un Memorando de Entendimiento (MdE) firmado en diciembre de 2024 y las autoridades mendocinas y brasileñas no solo abordaron el desarrollo de PRC como una oportunidad de integración productiva, sino que también analizaron en detalle las posibilidades de financiamiento para tres obras cruciales: una línea eléctrica, una ruta de acceso y la reconstrucción de ramales ferroviarios que conecten Malargüe con los principales corredores logísticos y portuarios. Esta última es, sin duda, un punto clave para destrabar el proyecto.
Sacar el mineral hacia destino es sin duda uno de los temas fundamentales para el éxito, a un nivel mucho menor del que se pensó originalmente, de esta mina de potasio que en un momento fue la gran esperanza de desarrollo para Mendoza. La falta de una conexión ferroviaria eficiente y la necesidad de construir una línea eléctrica y una ruta de acceso representaban un desafío que aún está pendiente.
Esta gestión que hace el Gobierno de Mendoza aparece como fundamental para que se concrete lo prometido por Minera Aguilar para PRC, sociedad en la que el Estado mendocino sigue siendo parte. Aunque el gobierno de Mendoza había recuperado el 100% de las acciones de PRC de Vale a fines de 2020, el proceso de búsqueda de un nuevo inversor llevó un tiempo. Tras un proceso de selección internacional, el 12 de septiembre de 2023, el gobernador Rodolfo Suárez firmó el Contrato de Traspaso de acciones con Minera Aguilar y ARG.
Minera Aguilar Potasio S.A. (junto con su socia ARG) posee el 88% de las acciones de Potasio Río Colorado S.A.U y la provincia de Mendoza retiene el 12% restante de las acciones, que se cedieron a Impulsa Mendoza Sostenible S.A., una herramienta creada por el gobierno provincial para el desarrollo minero.
El proyecto que no fue
El proyecto original de PRC tuvo una historia de aumentos significativos en la inversión proyectada antes de su paralización. La Inversión proyectada original cuando Vale adquirió el proyecto era de alrededor de U$S 5.900 millones.
Con el avance de las obras y la reevaluación de los costos, especialmente los asociados a la logística (ferrocarril y puerto), la cifra proyectada se disparó. Algunas fuentes indican que esta proyección llegó a ascender hasta los U$S 10.900 millones e incluso U$S 11.000 millones en un momento.
Al momento de su alejamiento, Vale había invertido una cifra que se calcula entre U$S1.500 millones a U$S2.900 millones.