Poco más de una semana transcurrió desde la última reunión de la Reserva Federal de EE.UU. donde se tomaron decisiones respecto a la política monetaria de la principal economía, situación que repercutirá a escala planetaria. De este encuentro se pueden observar algunas importantes implicancias para el oro. Ante un comportamiento errático durante los últimos meses, desde el World Gold Council (WGC) remarcan la necesidad de observar más allá de la volatilidad a corto plazo y enfocarse en el potencial a largo plazo. De esta forma, John Reade, Jefe de Marketing del WGC, destaca que el abrupto cambio en la política monetaria de la Reserva Federal debería elevar el precio del oro en los próximos 12 meses.
Un reciente informe presentado por el WGC analiza el comportamiento histórico del precio del oro luego del final de los dos últimos ciclos de alzas de interés por parte de la Reserva Federal. La investigación llevada a cabo por el WGC establece que en el primer mes después de que la Reserva Federal dejó de subir las tasas en 2001 los precios del oro cayeron un 0,6%, en tres meses bajaron un 3,4%, pero en 12 meses los precios del oro subieron un 3,6%. Cuando la Reserva Federal dejó de aumentar las tasas en 2007, los precios del oro se incrementaron un 7% en el primer mes, pero subieron casi un 20% luego de 12 meses.
En este sentido, el ejecutivo del WGC señala: “Creo que el punto es que los inversores deberían mirar más allá de los próximos 30 días y los próximos US$30. A largo plazo, una postura neutral de la Reserva Federal ha sido positiva para el oro y no veo ninguna razón para que sea diferente esta vez». Asimismo, agregó que una razón por la que la última decisión de la Reserva Federal es buena para el oro es solo la magnitud del cambio en la política monetaria: la semana pasada, el banco central de EE.UU. informó que no espera elevar las tasas de interés en absoluto este año, por debajo de las dos alzas de tasas previstas en diciembre. Al mismo tiempo, la Reserva Federal rebajó su previsión de crecimiento para 2019.
“Aunque factores externos, la creciente debilidad económica en Europa y la volatilidad en los mercados emergentes respaldan al dólar estadounidense, es difícil ver que este escenario se vaya a extender luego de los anuncios de la Reserva Federal”, destacó John Reade, para añadir que “una desaceleración en la economía de los Estados Unidos debería, en última instancia, tener un peso en los mercados de dólares y acciones de EE.UU., lo que incitaría a los inversores a buscar activos alternativos de refugio seguro como el oro.”