Se trata de Cancambria, un emprendimiento ubicado en el sur de Malargüe que inicia su fase de prospección mediante trabajos de gabinete, con una eventual exploración con perforación sujeta a resultados. El 20 de diciembre será la audiencia pública.
Por Panorama Minero
Mientras Mendoza aguarda definiciones concretas sobre el cumplimiento del cronograma comprometido para Potasio Río Colorado (PRC), este mineral vuelve a ocupar un lugar en la agenda minera provincial a partir del avance administrativo de Cancambria Exploración S.A., cuyo proyecto de cateo y prospección de sales de potasio (silvinita) en el departamento de Malargüe se encamina a una audiencia pública este 20 de diciembre como parte del proceso de evaluación ambiental.
El movimiento marca un contraste entre un proyecto de gran escala que aún enfrenta dificultades para normalizar sus plazos y una iniciativa que propone un esquema de exploración escalonado y técnicamente acotado, con un fuerte énfasis en el control ambiental desde sus etapas iniciales. En este caso, la autoridad ambiental minera definió que el proyecto de Cancambria debe comenzar formalmente en etapa de prospección, limitando los trabajos a actividades de gabinete y validación de información existente.
Cancambria Exploración administra más de 44.000 hectáreas en Neuquén como filial de Argentina Potash, siendo el proyecto más importante “El Ceibo”.
Prospección sin intervención directa
La fase que actualmente se espera habilitar se apoya casi exclusivamente en la reinterpretación de información geológica y geofísica preexistente, principalmente a partir de líneas sísmicas 2D y 3D y de registros de pozos petroleros históricos perforados en la cuenca. Dado que las sales de potasio no afloran en superficie por su alta solubilidad, la autoridad consideró que este enfoque resulta técnica y ambientalmente adecuado para definir el potencial del yacimiento sin generar impactos innecesarios.
Las tareas de campo previstas son escasas y eventuales, realizadas con vehículos livianos 4x4 y sin apertura de caminos, movimientos de suelo ni utilización de agua industrial o insumos químicos. En esta etapa no se prevén descargas al ambiente ni generación de efluentes, configurando un esquema de bajo impacto operativo.
El proyecto Cancambria se emplaza en el departamento de Malargüe, al sur de la provincia de Mendoza, dentro de la región de la Payunia, un ámbito de mesetas basálticas y colinas suaves con fuerte antecedente geológico e hidrocarburífero. El proyecto se localiza en dos áreas de cateo -CCMK-2 y CCMK-4- que en conjunto superan las 19.000 hectáreas, dentro del departamento de Malargüe y sobre la unidad morfoestructural de la Payunia. El objetivo geológico se centra en los niveles portadores de potasio alojados en el Miembro Troncoso Superior de la Formación Huitrín, inmediatamente por debajo de la Formación Rayoso, uno de los horizontes clásicos para la mineralización potásica en la cuenca neuquina.
Exploración profunda, sujeta a nuevos permisos
En función de los resultados de la prospección, Cancambria evalúa una segunda etapa de exploración, que implicaría la perforación de un pozo vertical profundo bajo estándares operativos de la industria petrolera. El diseño preliminar contempla un pozo de entre 1.000 y 1.500 metros de profundidad, con extracción de coronas para confirmar la presencia de niveles potásicos.
La perforación se realizaría bajo sistema de locación seca, sobre una plataforma de aproximadamente 100 por 100 metros, con impermeabilización de los sectores críticos mediante geomembranas. La duración operativa estimada del pozo sería de 15 a 20 días, con una dotación de personal especializada y turnos rotativos.
A diferencia de la prospección, esta etapa sí incorporaría consumos de agua industrial -estimados en torno a 25 m³ diarios- y la utilización de lodos de perforación a base de agua con aditivos biodegradables. El manejo ambiental prevé un esquema de descarga cero, con recirculación de lodos, traslado de residuos a plantas autorizadas y gestión controlada de efluentes sanitarios. Cualquier avance en este sentido quedará supeditado a la aprobación de un aviso de proyecto específico por parte de la autoridad competente.

Marco ambiental y condicionantes técnicos
Los estudios incorporados al expediente incluyen una caracterización hidrogeológica detallada, que identifica acuíferos subálveos y de meseta con calidades de agua variables, así como la presencia de horizontes yesíferos y salinos. Estos elementos resultan centrales para el diseño de la eventual perforación y para la definición de medidas de protección del recurso hídrico.
Asimismo, se registró la existencia de cavidades naturales en sectores del área de cateo, relevadas a partir de información de la Unión Argentina de Espeleología, lo que introduce restricciones adicionales en la localización de accesos y locaciones, y refuerza la necesidad de una planificación precisa de las actividades futuras.
Desde una perspectiva técnica y regulatoria, el avance del proyecto Cancambria reintroduce al potasio en la agenda minera mendocina bajo un modelo distinto al de PRC. Se trata de una exploración gradual, de menor escala inicial y con fuerte supervisión ambiental, que permite generar información geológica relevante sin comprometer grandes volúmenes de inversión ni infraestructura en las primeras etapas.
En un contexto donde el desarrollo de Potasio Río Colorado continúa condicionado por demoras en su cronograma, la convocatoria a audiencia pública para Cancambria habilita a la autoridad minera a retomar la evaluación de proyectos potásicos y poner a prueba, nuevamente, los procedimientos técnicos y administrativos asociados a este tipo de emprendimientos.



























